El presidente Javier Milei cumple un año de mandato. Desregulación de la economía, inflación a la baja y quita de impuestos, las promesas y las claves del primer año de Gobierno libertario.
Inflación
Durante la campaña electoral de 2023, Milei centró su discurso económico en la necesidad de contener la inflación, un fenómeno que desde el punto de vista del libertario se produce «siempre y en todo lugar» por razones relacionadas con la emisión monetaria. Cuando asumió, la economía venía de un 12,8% de aumentos de precios promedio en noviembre de 2023 y un acumulado durante los 12 meses anteriores de 160,9%.
Apenas comenzó su mandato, el economista dispuso de una serie de desregulaciones en las principales políticas de control de precios y de una devaluación del tipo de cambio oficial del 118%, lo que disparó el indicador hasta el 25,5%, el registro más alto desde 1990. En enero se produjo otra fuerte suba, traccionada sobre todo por los precios de los alimentos, los servicios y el transporte, que derivó en un promedio mensual del 20,6%.
Desde entonces, salvo en junio, la inflación se desaceleró todos los meses y pasó del 13,2% de febrero al 2,7% de octubre, el último dato oficial publicado por el Indec. Entre diciembre de 2023 y octubre de 2024 la suba de precios promedio acumulada fue del 160%. Si se cumplen las expectativas del mercado que releva todos los meses el Banco Central y el IPC del Indec arroja un 2,8% en noviembre y un 2,9% para diciembre, el interanual de los primeros 12 meses de Milei será del 175%.
Brecha cambiaria.
Cuando asumió, el nuevo Gobierno asumió con un dólar oficial a menos de $400 y un paralelo que fluctuaba por encima de los $1.050. En octubre de 2023, la brecha entre ambos tipos de cambio llegó incluso a superar el 200%, en un marco de escasez de reservas, estrictos controles de cambio y un acceso restrictivo al mercado oficial de divisas para cualquier tipo de usuario.
Ni bien llegó a la Rosada, Milei dispuso una devaluación del 118% que llevó el dólar oficial a $820, y anunció una política de incrementos controlados a un ritmo constante del 2% mensual.
También creó un nuevo tipo de cambio para exportadores, el «dólar blend», compuesto por un 80% de la cotización oficial y un 20% del valor del dólar Contado Con Liquidación (CCL), medida que fue efectiva para intervenir en este mercado paralelo financiero al generar allí más oferta de dólares, lo que evitó su apreciación.
Luego de estas decisiones iniciales, que achicaron en forma significativa la brecha, el Gobierno logró sortear una nueva suba de los paralelos (que alcanzaron sobre mitad de año los $1.500) sobre todo gracias a la inyección de dólares que supusieron el blanqueo y el ingreso de actores del sistema financiero internacional a instrumentos en pesos para aprovechar el carry trade o bicicleta financiera que garantiza la devaluación controlada.
Hoy, el dólar oficial está en torno a los $1.034 y la diferencia nominal con el blue y los paralelos financieros oscila entre el 2% y el 6%.
Reservas.
De acuerdo con un informe de fines de noviembre de la consultora Outlier, el Banco Central compró durante 2024 más de U$S 18 mil millones, la cifra más alta en más de 20 años. Sin embargo, las reservas netas de la institución registran un saldo negativo de U$S 8.471 millones, apenas U$S 253 por encima del registro de diciembre de 2023. Este fenómeno está relacionado sobre todo con los vencimientos de deuda que comenzaron a acumularse sobre la segunda mitad del año. Esta situación lleva al Gobierno a aspirar a un nuevo acuerdo con el FMI para 2025 para intentar contener esta variable.
Riesgo País.
Milei asumió la primera magistratura con 1.923 puntos de riesgo país, indicador que subió durante las primeras semanas del mandato y tocó un valor récord de 2.102 puntos básicos. En los meses siguientes, este registro sufrió un acelerado descenso hasta los 1.148 puntos a fines de abril y una suba posterior hasta los 1.653 puntos en agosto. En ese momento, gracias a la implementación del blanqueo y a la consolidación al alza de los bonos argentinos en Wall Street, comenzó un nuevo ciclo descendente que lo colocó sobre los 700 puntos a fines de noviembre, el valor más bajo desde 2019.
Resultado fiscal.
Otra de las promesas troncales del andamiaje discursivo libertario durante la campaña electoral había sido el recorte al gasto político y el achicamiento del Estado. El programa de emisión cero y déficit cero se sostiene, en buena medida, con un ajuste fiscal sostenido como ancla:
En los primeros 10 meses de 2024, según los últimos datos oficiales del Ministerio de Economía, el Sector Público Nacional acumuló un superávit financiero de aproximadamente 0,5% del PIB y un superávit primario de aproximadamente 1,8% del PIB. Sin embargo, este saldo no está dado por una suba en los ingresos, que cayeron 3% interanuales, sino por una caída del gasto público de casi el 30%.
Según el CEPA, de cada $4 recortados durante 2024, $1 proviene de las jubilaciones, $1 del freno a la obra pública y $2 del resto de las partidas. En relación a los ingresos del Estado, cabe destacar que su desplome está relacionado sobre todo con el derrumbe del IVA y otros impuestos como Ganancias producto de la recesión.
Actividad.
El Estimador Mensual de Actividad Económica (EMAE) del Indec registró un desplome de la actividad económica durante los primeros meses de la gestión de Milei. La licuación de los ingresos de los trabajadores y el freno a la obra pública provocaron una caída sostenida de la actividad hasta abril, cuando se encontraba 4,4 puntos por debajo del nivel de noviembre. Desde entonces, el indicador registró subas moderadas en mayo (0,7%), junio (0,1%) y agosto (0,9%), un incremento más considerable en julio (2,7%) y una caída del 0,3% en septiembre, mes en el que la actividad estaba aun 3,1% por debajo del nivel del mismo mes de 2023. El crecimiento desde abril, además, no se dio de manera homogénea, sino que estuvo traccionado sobre todo por un mejor desempeño del agro (que el año pasado había sido muy afectado por la sequía) y la actividad minera, mientras que la construcción está 20 puntos por debajo de los niveles de 2023, la industria cayó en el mismo período más de 12% y el comercio 10%.
Balanza comercial.
Durante los primeros 10 meses del año, de acuerdo con las cifras de intercambio comercial argentino (ICA) que publica el Indec, el saldo comercial argentino registró un superávit de U$S 888 millones. Durante ese período, además, las exportaciones crecieron un 30% respecto de la misma etapa en 2023, sobre todo a partir de la recuperación post sequía del campo, y las importaciones crecieron 4,9%, con aumentos destacados en bienes de capital, vehículos y bienes de consumo. Las importaciones comenzaron a recuperarse en los últimos meses, sobre todo a partir de la disminución del Impuesto PAIS en septiembre, por lo que resta ver qué impacto tendrá la eliminación definitiva de dicho tributo a fin de año en la balanza de 2025.
Puestos de trabajo.
Según los últimos datos oficiales disponibles de la Superintendencia de Riesgos del Trabajo, entre noviembre de 2023 y agosto de 2024 se perdieron más de 261 mil puestos de trabajo. La Confederación de Sindicatos Industriales de la República Argentina (CSIRA) afirma que al menos 126 mil de esos trabajadores provenían del sector industrial, donde cerraron a lo largo del año más de 2.300 empresas. En la administración pública nacional se destruyeron en esos meses casi 38 mil puestos de trabajo, un 11% de la dotación total. Según Luis Campos, investigador del Instituto de Estudios y Formación de la CTA Autónoma, en julio la tendencia a la baja comenzó a revertirse y hasta noviembre se registraron 3 meses de modesto crecimiento en la generación de empleo formal.
Salarios.
Según el último Índice de Salarios del Indec, correspondiente a septiembre, los ingresos de los trabajadores cayeron 6,8% en relación a la inflación desde noviembre de 2023. Este derrumbe está traccionado sobre todo con una fuerte caída de las remuneraciones en el sector privado, que suma el 16,1%, y un descenso del 1,5% en las de los privados. Estos datos indican, además, que los sueldos comenzaron a recuperarse a partir de abril luego de una fuerte baja en los primeros meses del Gobierno, aunque aun siguen sin recuperar los valores iniciales.
Un informe publicado en las últimas semanas por Fundar destaca, además, la heterogeneidad de esta incipiente recomposición de los ingresos. Algunos de los salarios más afectados por el nuevo rumbo de la política económica fueron los docentes universitarios, que perdieron un 25% del poder adquisitivo de sus ingresos entre noviembre de 2023 y septiembre de 2024, las trabajadoras de casas particulares (21% menos), el sector público en general (16% menos) y los trabajadores no registrados (13% menos). En contrapartida, los salarios bancarios cayeron apenas 0,3%.
Consumo.
El consumo privado se desplomó durante el primer semestre del año, cuando cayó un 8,2% respecto del mismo período en 2023. Según la Encuesta de supermercados del Indec, las ventas en estos establecimientos de consumo masivo estaban en octubre un 12,8% por debajo del nivel que tenían un año atrás. La Cámara Argentina de la Mediana Empresa (CAME) informó también que en el décimo mes de 2024 las ventas minoristas acumularon una pérdida del 13,2% en lo que va del año. La consultora Scentia, por su parte, afirma que la pérdida de ventas en supermercados de cadena cayó 20,7% en la comparación interanual de octubre, registro similar al 20,2% que perdieron los autoservicios independientes.
Pobreza.
Según los últimos registros oficiales del Indec, la pobreza aumentó del 41,7% al 52,9% durante el primer semestre del año, un incremento de 12,8 puntos porcentuales. Dentro de dicho período, el Observatorio de la Deuda Social de la Universidad Católica Argentina sostiene que el pico de aumento de la pobreza se produjo durante el primer trimestre de 2024, cuando saltó del 45,2% al 54,8%, para luego caer durante los tres meses siguientes al 51%. Además, el organismo proyectó un descenso de este indicador también durante el tercer trimestre del año, cuando podría haber bajado al 46,8%.
Jubilaciones.
En lo que va del mandato de Milei, la jubilación mínima perdió un 33% del poder adquisitivo de los ingresos, un monto equivalente a más de $100 mil por mes por jubilado. Además, la decisión del Ejecutivo de aumentar los haberes previsionales por inflación y congelar el bono consolida un escenario de pérdida mes a mes para los jubilados que menos cobran ante las subas de precios. Además, el Gobierno redujo a lo largo del año la cobertura de medicamentos para los afiliados de PAMI, que en los últimos días volvió a acotar el universo de quienes pueden recibir medicamentos gratuitos.
Fuente: corta.com
Por Francisco Muzzo
