El 17 de noviembre es el Día Mundial del Cáncer de Pulmón, un día para concientizar sobre la prevención y los factores de riesgo como el tabaco, el alcohol y otras sustancias nocivas para la salud.
Según el Observatorio Global de Cáncer de la Organización Mundial de la Salud (OMS), en Argentina el cáncer de pulmón es el cuarto de mayor magnitud, y el más mortal.
Se trata de una enfermedad que afecta de manera directa las células de los pulmones, provocando un crecimiento anómalo de las mismas, que poco a poco van minando y dañando los tejidos y el canal respiratorio.
Es peligroso porque muchas veces esta enfermedad es asintomática, es decir, las personas no experimentan molestias, sin embargo, hay pacientes que pueden presentar algunos síntomas como tos crónica o con sangre, dificultad respiratoria, dolor en el pecho, ronquera, pérdida de apetito o bajar repentinamente de peso.
Cáncer de Pulmón: ¿Cuáles son los factores de riesgo?
Hay factores muy específicos que aumentan drásticamente las posibilidades de padecer Cáncer de Pulmón. Alguna de ellas son:
- Humo de tabaco: es la principal causa de la mayoría de los casos. Las sustancias nocivas en el tabaco dañan de forma permanente las células de los pulmones.
- Contaminación del aire: este factor aumenta el riesgo de cáncer de pulmón y sobre todo más de las personas que son fumadoras.
- Exposición a sustancias nocivas: las personas que trabajan en la industria de la construcción, química y minera pueden estar expuestas a gases y sustancias que aumentan el riesgo de padecer Cáncer de Pulmón.
- Antecedentes familiares: las personas que tienen un padre, madre, hermano o hermana que padecieron Cáncer de Pulmón.
- Edad: las personas mayores de 65 años
El principal método de prevención, asimismo es evitar el tabaco y mantener los ambientes libres de humo es la principal medida de prevención de este tipo de cáncer y de otros.
También se debe tener en cuenta la importancia del diagnóstico temprano ya que en estadios tempranos, el cáncer de pulmón puede ser tratado quirúrgicamente con éxito de curación en el 20% de los casos aproximadamente.
Por su parte, en la actualidad, la medicina ha dado pasos agigantados, logrando grandes avances científicos y tecnológicos, los cuales han contribuido a técnicas más innovadoras y tratamientos que permitan mejorar la calidad de vida de los afectados, así como a bajar la tasa de mortalidad.
Es así que un diagnóstico preciso y realizado de manera oportuna puede ayudar a salvar la vida de muchos más pacientes, ya que hay la posibilidad de recurrir a tratamientos que puedan ser eficaces, menos invasivos y mucho más seguros.
Así mismo, es importante que las personas tengan conciencia de que la prevención va a depender de manera directa de la propia persona, evitando exponerse a los factores de riesgo que puedan afectar su salud como son la ingesta de sustancias nocivas, además tener una mejor calidad de vida, donde prevalezca una alimentación sana, realizar algún tipo de actividad física y bajar los niveles de estrés.
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